lunes, 13 de agosto de 2018

SLOW READING (lectura lenta).


Siempre me ha gustado leer.
Pasaba horas y horas leyendo... pero de repente dejé de hacerlo.

Cada vez somos más las personas que estamos dejando de leer libros, no porque nos disguste. si no porque no podemos concentrarnos, perdemos el hilo de la lectura con frecuencia, con gran extrañeza por nuestra parte. 
¡Qué me está pasando?... 

Acabo de leer en una revista dominical que para remediar este problema que, yo no imaginaba tan frecuente, están surgiendo clubs de SLOW READING (lectura lenta), cuyos miembros tienen  que comprometerse a hacer estas dos actividades:
1ª.-Prepararse para la lectura respirando profundamente, como si se tratara de iniciar una sesión de yoga.
2ª.-Dedicar 45 minutos a leer en silencio el libro que cada uno elija. 

"Los efectos del SLOW READING son impresionantes y muy visibles. Basta 45 minutos de lectura lenta para despertar las estrellas fugaces que hay dentro de cada persona".

Y esta es la justificación :
"Estamos perdiendo la capacidad de concentrarnos en cualquier cosa por vivir de manera cada vez más acelerada. Pero leyendo un libro podemos pararlo todo -el tiempo, las preocupaciones...-. La cuestión no es leer por motivos intelectuales, si no por salud y bienestar".

La LECTURA LENTA PROFUNDA , es un excelente TRATAMIENTO ANTIESTRÉS.

Sin embargo, la tendencia es la contraria.
Lo que se lleva es el culto a la velocidad y la mentalidad de correcaminos en todo:
- visión de películas poniendo la velocidad a 1'50 para poder ver un filme de 2 horas en sólo una.
- lectura, sólo es posible leer con precisión un promedio de 200 a 300 palabras por minuto y proliferan los métodos para quintuplicar esta cifra.

Dice Woody Allen :
"He hecho un curso de lectura rápida y he leído GUERRA Y PAZ en 20 minutos; va de Rusia"
------------------jajaja.

*** fuera bromas "es un problema serio", que afecta nuestra paz interior y estropea nuestros nervios.

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