Con las vocales, -M- y -P-, hacemos el "dictado de letras recortadas"; la palabra que le nombro a Luis, la tiene que formar primero encima de la mesa, con esas letras que él mismo ha "fabricado", hasta que no está bien, no dejo que la escriba en su cuaderno (observo que a veces los fallos están en que no discrimina bien los sonidos, trabajamos también la "discriminación auditiva").
Al final acertamos y Luis escribe la palabra en su cuaderno: ¡¡muy bien Luis, lo has hecho muy bien!!
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No, no nos hemos equivocado, hoy tocaba -P-, pero Luis tiene mucha confusión con la direccionalidad de -d- la confunde con -b-, él se da cuenta y sufre, vamos a ayudarle; así que intercalo ejercicios de esa letra, aunque todavía no la hemos recortado (es otro tipo de juego).
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Y el concepto correcto de su esquema corporal, el suyo y el de los demás:
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Ejercicios de "orientación espacial"
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Ejercicios de atención e imitación.
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En todas las sesiones no nos olvidamos de hacer ejercicios de :
-orientación temporal, de este tipo "¿que día de la semana es hoy?", "¿es por la mañana o por la tarde?", "¿qué día fue ayer?, señalaló en el calendario", "¿hace frío o calor?, entonces ¿en qué estación del año estamos?"....
-entrene auditivo.
-contar cuentos y que él me los cuente a mí, con una correcta secuencialización...
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-los niños disléxicos que me llegaban, ya tenían un bagaje de conocimientos lectores, pero desordenados (no sé si esa es la palabra correcta; quiero decir "que tenían un lío" en su cabecita); había que organizar esos conocimientos, darles claridad; después de varios ensayos, opté por empezar siempre de -0-, nos resultaba más operativo tanto al niño como a mí-
-me gustaba reeducar dislexias....-
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Hasta pronto, entonces os contaré la 3ª sesión.
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