Acabo de leer en la prensa una pequeña biografía de SEVERO OCHOA con alguna anécdota de su vida. Y he recordado (salvando las distancias) alguna de la mía. Por ejemplo:
-En la cena de mi jubilación, mi director les dijo a mis compañeros "poneos corbata porque el marido de M. José llevará corbata y yo le dije a mi marido "no te pongas corbata porque mis compañeros no la llevarán". Y así fue.
-En el primer colegio que trabajé (creo que esta ya la conté en algún momento en este blog)llevé a mis niñas al laboratorio de visita cultural y la profesora de química me preparó dos vasitos con un líquido en ambos que parecía agua pero al mezclarlos se transformaba en otro de color rojo, mis pequeñas alumna tenían 5 años. La visita fue muy bien pero al cabo de unos días viniero mis compañeras muertas de risa a decirme "¿sabes que van diciendo tus niñas?...*la señorita M. José ha convertido el agua en vino* (como en las bodas de Caná).
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l-Las anécdotas...la sal de la vida.
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